Read Ocho peculiares by Lalia Alejos Capítulo 174

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Capítulo 174 Dos espíritus de agua

Liliana apretó el amuleto en la mano, frunciendo el ceño al ver la lona a la distancia.

-Este Espirit: Resentido es muy duro-dijo Liliana.

-Ella… ich? -preguntó Braulio-. ¿Qué pasa?

Liliana señaló el cadáver a la distancia.

-Papá, tiene los ojos cerrados.

Braulio miró. Era verdad. Nadie le había estado prestando atención al cadáver, pero Liliana había estado observando de cerca. Sus ojos estaban redondos y abiertos y ahora estaban cerrados.

Braulio dijo:

-Pero eso no le pasó al cadáver del chico de anoche.

Los ojos del cadáver masculino se habían puesto en blanco en el río. Se movió dos veces cuando llegó a la orilla y lo siguió.

Liliana se quedó mirando el río largo rato.

-Ya lo entendí. Estábamos equivocados, papá.

Braulio dijo:

-¿Qué?

Liliana respondió:

-Debe haber dos Espiritus Resentidos. Uno de ellos es feroz, el otro no tanto. El que te agarró ayer era el más feroz, papi. Creo que el menos feroz está en el cuerpo de esa señora.

Braulio comprendió enseguida.

-Así que solo fueron dos las chicas que cayeron al agua por la noche. Esa chica, Vanesa, habia estado muerta durante mucho tiempo y se había convertido en un anzuelo. El chico vio a Vanesa después de salvar a las dos chicas y se metió al agua. Entonces lo asesinó el Espiritu Resentido.

Liliana asintió, levantando un pulgar.

-¡Eres un genio, papá!

Braulio movió las cejas.

-Pues claro.

Liliana dijo:

-De todos modos, ¿cómo cayeron las dos chicas al agua? ¿Vieron a Vanesa cuando se cayeron?

Braulio dijo:

-Ya lo investigué para ti. Las chicas pensaron que las luces se veían muy bonitas reflejadas en el agua y se cayeron mientras trataban de tomar fotos. No vieron a Vanesa, pero sintieron que las arrastraban. Estaban demasiado aterrorizadas en ese momento para creer que solo se trataba de la corriente.

El chico pasaba por allí y las rescató de inmediato. El chico acababa de llegar a la orilla cuando escuchó un chapoteo y a alguien gritando, pidiendo ayuda.

Padre e hija comprendieron. El chico había salvado a las dos chicas y se suponía que nadie debía morir en primer lugar. El problema era Vanesa.

Braulio vio a Vanesa ya muerta erguida bajo el árbol junto al rio cuando fue allí a ver. La marea había estado baja, asi que Vanesa no tenía forma de subir a la orilla. Incluso si la hubiera atrapado una rama, no había forma de que se mantuviera de pic.

Liliana jugueteó con el amuleto en sus manos, su tono era de preocupación.

-Ahora lo entendemos. Solo que no sabemos cómo atrapar a los dos Espiritus Resentidos.

Los dos espíritus tal vez ya la habían visto y lo más probable era que no fueran a acercarse a la orilla del rio tan pronto.

Braulio bajó la mirada y susurró:

-Liliana, ¿qué te parece si te llevo a dar un paseo en barco esta noche?

Liliana se animó de inmediato, levantando una mano.

-¡Sí, por favor!

-Pero papá, el fantasma tal vez nos va a reconocer. Deberíamos disimular.

Se tapó la boca con la palma de la mano al susurrar. Braulio la tomó en brazos.

-Quieres decir que nos disfracemos.

Liliana dijo:

-Sí, así

que deberías vestirte de mujer para que no te reconozca, papá.

Braulio estaba desconcertado por eso.

Al enterarse de que Braulio y Liliana ya se iban, Ibero guardó por fin sus teléfonos y se fue a toda prisa.

Cada vez se agolpaban más creadores de contenido, intentando conseguir imágenes de primera mano del cadáver. Todos fueron detenidos por la seguridad fuera del jardin.

Jbero siguió caminando, sin preocuparse por conseguir una toma. Tenía noticias de última hora.

Al volver a su habitación, Ibero se puso a trabajar de inmediato.

Después de terminar de editar los títulos, su contenido llegó a los primeros lugares en las búsquedas:

Hallan cadáver de mujer.

Un hornbre ve cómo se ahoga una mujer».

-La madre de la fallecida maldice al equipo de rescate.

La mayoría de los comentarios eran parecidos:

¡Descansa en paz!».

Me hizo llorar-.

-¡Espero que no haya sufrimiento en el cielo!”.

Después de eso, estaba el video de Braulio impidiendo que la gente rescatara a la chica.

-¿Quién es este? ¿No va a rescatar a la chica, pero tampoco deja que otros lo hagan?».

Estoy sin palabras. ¿Cómo puede existir gente así?».

«Sí, pero vi otro video de la madre de la niña culpando al equipo de rescate por llegar demasiado tarde para salvar a su hija. Ja, ja, ja. Creo que la gente así debería morir. No merecen ningún tipo de compasión-.

-¡Yo también lo vi! Dios, me subió la tensión viendo a esa vieja bruja gritar como una loca…

Es cierto, pero ese tipo alto tampoco es un ángel. ¿Por qué impidió que el resto ayudara?».

No creo que todos deban hablar antes de tiempo. Tal vez había peligro en el agua, iy por eso el tipo alto no los dejó entrar!».

Para evitar más confusiones, los internautas se apresuraron a buscar videos relacionados para tener una visión más clara de lo que había en el agua. Y encontraron un video borroso de una mujer de mediana. edad arrastrada por un cadáver flotante.

Los internautas quedaron conmocionados..

-Maldita sea, es una broma?..

-Es falso, ¿verdad? Todos los videos están muy borrosos, iestoy seguro de que alguien los editó!».

Rayos. ¿En qué año vivimos? ¡Todos los teléfonos tienen cámaras de alta definición hasta que se trata de lo sobrenatural o de ovnis! ¡Están inventando todo esto!–.

iNo es falso, yo estaba allí! Creo que vi ese cadáver moverse».

Y así, el tema sobre el supuesto cadáver falso llegó a las primeras búsquedas. Eso era lo que Ibero habia estado esperando. El tenía imágenes muy claras.

-ija, ja! No saben lo que les espera.

Ahora si que se iba a hacer viral.

Ibero subió el video de inmediato. Fue inteligente al subir primero el video del cadáver arrastrando a sn

madre al agua.

La historia completa: primera parte. Niña ahogada enloquece y arrastra a su madre bajo el agua.

En menos de media hora, el video explotó como un cañón. Los internautas se llevaron un susto de

muerte.

Caramba, qué video más claro. ¡Me c’gué encima! Incluso vi lo pálida que estaba la cara de esa chica..

-Soy una buena persona y creo en la bondad, la gracia, el amor, la confianza, la ley y en mi pais..

Siento mucho haber visto esto. Por favor, cuida de mi, Dios, y protégenos a mi familia y a mí de cualquier daño..

Hubo incluso comentarios de textos religiosos y, por supuesto, también estaban los escépticos:

“Qué video tan claro. ¿Lo editaron después? Ja, ja, ja. No puedo creer que la gente crea esta basura.

«Tiene que estar editado. Apuesto todo mi dinero-.

 


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Score 9.9
Status: Ongoing Released: 12/16/2023 Native Language: Spanish
Ocho Peculiares" by Lalia Alejos is a captivating novel that intricately weaves together the lives of eight peculiar characters, exploring the depths of their eccentricities and the interplay of their destinies in a rich narrative that transcends conventional storytelling boundaries.  

Read Ocho peculiares by Lalia Alejos

Detail Novel

Title: Read Ocho peculiares by Lalia Alejos
Publisher: Rebootes.com
Ratings: 9.3 (Very Good)
Genre: Romance, Billionaire
Language: Spanish    
 

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Capítulo 1

Ciudad Lavanda, primera zona residencial; Mansión Juárez. Hoy era el festival de las linternas. Luces de colores estaban decoradas alrededor de la casa, dando un toque de calidez a la fría atmósfera de la Familia Juárez. De repente, un grito resonó por toda la mansión. —Ay. Seguido de un ruido sordo, ¡una mujer embarazada cayó por las escaleras! Todos se sorprendieron y corrieron hacia ella. Esteban Juárez, presidente de la Corporación Ador Juárez, preguntó rápido: —Débora, ¿estás bien? El rostro de la mujer palideció al ver la sangre fresca que le corría por las piernas. Horrorizada, respondió: —Esteban, me duele... Nuestro bebé... ¡Rápido, salva a nuestro bebé! La madame de la casa, Paula Andrade, presa del pánico, preguntó: —¿Qué sucedió?
Débora miró hacia lo alto de las escaleras con lágrimas en los ojos. Todos levantaron la vista y vieron a una niña, de unos tres años, de pie en lo alto de la escalera. Al ver la mirada de todos, abrazó con fuerza el conejo de juguete que tenía en los brazos, asustada. Ricardo Juárez rugió furioso: —¿Fuiste tú quien empujó a Débora? La niña hizo un berrinche. —No fui yo, y yo no... Mientras lloraba, Débora suplicó: —No... Papá, no es culpa de Liliana. Todavía es joven, y ella no quería... Sus palabras reafirmaron rápido que era culpa de Liliana. Los ojos de Esteban se oscurecieron, y ordenó de inmediato: —¡Enciérrenla en el ático! Me ocuparé de ella en cuanto regrese. El otro se apresuró a enviar a Débora al hospital mientras los sirvientes arrastraban a Liliana escaleras arriba. Incluso cuando se le cayó un zapato, mantuvo un rostro obstinado y no suplicó ni gritó pidiendo ayuda.

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